La niña Shassira Ceballos vive una milagrosa recuperación de la leucemia

“Fue un milagro de Dios”. Con esa frase, Vanesa Albarracín explica la recuperación de su hija Shassira Ceballos, a quien hace dos años le diagnosticaron leucemia linfoblástica aguda avanzada y los médicos “le dieron siete días de vida”.

Shassira, que tiene 10 años y vive con sus padres y sus dos hermanitos en el Sector C de Villa Balnearia, recibió el alta al finalizar el largo tratamiento contra la leucemia, que incluyó varias sesiones de quimioterapia en el Cepsi de Santiago del Estero. Su caso fue seguido también por profesionales del Hospital Garrahan de Buenos Aires. Ahora sólo deberá acudir para controles periódicos mensuales.

Su mamá, Vanesa, dialogó esta mañana con FM TERMAS DIGITAL donde informó la buena noticia y agradeció a los médicos y a todas las personas que la ayudaron espiritual y económicamente, especialmente a quienes se unieron en oración pidiendo por la salud de su hija.

“Fue un milagro que Dios hizo. De tantas oraciones, de tanto clamor que hubo por Shassira. Fue un milagro que Dios hizo en su vida. Que tomó el control y dominio de la vida de ella a través de los médicos y las medicinas”, contó emocionada.

La noticia de la recuperación de Shassira se da en un momento especial en Las Termas, donde Abigail Jiménez, otra niña que padece cáncer, sufrió hoy una descompensación y sus padres pidieron cadenas de oración por su salud.

Para Dios no hay imposible

En un mensaje para ellos y para otros padres que tienen a sus hijos con cáncer, Vanesa les pidió: “No pierdan la esperanza. Tengan fe en Dios. Que para Dios no hay imposible. Siempre hay que pedir lo positivo para nuestros hijos y para aquellos que no lo son también”.

Al recordar la historia de su hija, Vanesa relató que los momentos más duros que le tocó vivir fue hace dos años, cuando le dieron el diagnóstico de la enfermedad que padecía Shassira: leucemia linfoblástica aguda y en un estado avanzado.

Explicó: “Cuando le han diagnosticaron la leucemia, nos dijeron que tenía 7 días de vida. No nos dieron esperanza. Esto fue porque tenía 300 mil células malignas. Estaba muy avanzada la leucemia. Esto me dijeron en el Cepsi. Mientras tanto yo viajaba a Tucumán y Bs.As. Al quinto día los médicos comenzaron a hacer el tratamiento con una pastilla. A los 7 días después de comenzar a tomar la pastilla, bajó a 3000 celulas malignas. O sea que ya no estaba avanzado”.

“El primer año de tratamiento de Shassira fue muy duro. Le pusieron quimios muy fuertes. Ella se descompensaba siempre. A ella le hacían las ´quimio´, le daban el alta y en la casa le agarraba fiebre y teníamos que ir a Santiago nuevamente. En diciembre y enero pasados se iba mejorando. No caía tan seguido internada”, relató.

Les dije a los médicos que mi hija iba a vivir

Al reflexionar sobre todo lo ocurrido, Vanesa dijo: “Es algo que jamás pensé en vivirlo. Viví el dolor, la angustia, la tristeza. Les digo que no fue fácil, fue muy difícil. Lo que pido es que no perdamos nunca la fe ni la esperanza. Sufrí mucho, cada noticia que me daban los médicos, desde el momento en que me dijeron que mi hija no tenía esperanza de vida; cuando me decían que mi hija no iba a vivir. Yo siempre les dije a los médicos que no iba a ser así. Yo les decía que mi iba a crecer y que iba a jugar. La voy a ver cuándo sea grande. Y hoy la tengo bien gracias a Dios. Gracias a todos los que oraron por ella”.

Al cierre de la entrevista, volvió a agradecer: “Estamos muy agradecidos porque desde un principio nos acompañaron en las buenas y en las malas. En lo sentimental, en lo económico, en todo. Gracias por todas las ayudas recibidas. Lo considero mucho para mi corazón, porque me apoyaron en el momento más duro en mi vida. Gracias a todos”.

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Fotos: Proporcionadas por la familia Ceballos Albarracín, quienes autorizaron su publicación a el Portal Termas Digital