Cardenal Bokalic: “Sean grandes en el servicio”

El cardenal primado de la Argentina y arzobispo de Santiago del Estero, monseñor Vicente Bokalic Iglic, visitó Las Termas de Río Hondo donde presidió la celebración de Pentecostés e instituyó el sacramento de la confirmación a aproximadamente 200 jóvenes y adultos, lo cual tuvo lugar en la parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

Durante su homilía, el arzobispo dejó pasajes profundos en su mensaje a los flamantes confirmados y feligresía, indicándoles que, como cristianos “no podemos conocer a Dios si no recurrimos a la palabra de Dios” invitándolos a nutrirse de la Palabra que es luz y fuente de sabiduría.

También los invitó a vivir la humildad, ser fieles que busquen servir por amor, sin buscar el protagonismo o el poder. “En el mundo nos peleamos mucho, quién es el más importante, el bichito de la ambición lo tenemos todos, gente que busca ser grandes, famosos, para denigrar a los demás” sostuvo, indicando que “se crean guerras, las inventan los grandes, los que les importa la guerra y el poder para dominar a los demás”.

“Si quieren ser los primeros, sean los últimos” recalcó sobre la importancia del servicio. “Sean grandes en el servicio” puntualizó.

“Reciben el Espíritu Santo para luchar contra el espíritu del mundo, el que nos dice sálvate a vos solo; el Espíritu Santo habré nuestros corazones a los demás” agregó.

En el mismo mensaje, apuntó que la obra de los cristianos es servir: “Nosotros decimos ¡Viva Jesús! cuando ayudamos a los demás”.

Por último, les pidió que empiecen a actuar desde sus propios hogares, con sus propios familiares y allegados preguntándoles ¿Cómo están? “porque hay mucha gente que está sola, desprotegida, sin expectativas del futuro, sin ese amor de la familia, y caen en situaciones como la drogadicción” expresó, invitando a juzgar menos y escuchar más. “No tenemos la solución al problema, pero podemos empezar a ayudar a cambiar esto, con la ayuda del Espíritu Santo, a salir como lo hicieron los discípulos que estaban temerosos también a las persecuciones, pero con el don del Espíritu Santo salieron a evangelizar el mundo”.