Ahora es el turno de los +60

El pasado jueves la ANMAT dio por aprobada la vacuna rusa Sputnik V para la aplicación en pacientes mayores de 60 años, y de esa manera se dió inicio a la colocación de la dosis a quienes han nacido desde la década del ’60 para atrás, principalmente a personal de la salud.

La aprobación fue envuelta en polémicas con los negacionistas del virus o desconfiados de la capacidad de los científicos argentinos que han evaluado la capacidad de esta vacuna. Para dejar de lado cualquier suspicacia, fue el propio presidente Alberto Fernández quien el pasado jueves se sentó en una silla del hospital Posadas, se ha arremangado y dejó el brazo listo para que le apliquen la primera de las dos dosis de la Sputnik V.

Con este gesto, el actual líder político de la Argentina a intentado llevar un mensaje a los de abajo, y esperando principalmente que sean los gobernadores los próximos a demostrar que la vacuna no presenta efectos secundarios dañinos, como se intenta hacer creer mediante algunos voceros de la columna de los anti cuarentena, anti vacunas y negacionistas del virus del SARS CoV2.

Ahora, con el objetivo de salvar al país de Ia segunda ola que no solo impacte negativamente en la salud de los argentinos, sino también en las cuentas del estado, el gobierno va por otras 600 mil dosis más que serán traídas desde el gigante que se divide en dos continentes, Rusia.

Pero, más allá del esfuerzo que involucra a personal de la aerolínea de bandera, desafortunadamente no se podrá cumplir con la cantidad de dosis que se esperaba para el mes de enero, aunque se llegaría con amplía ventaja al otoño cuando comienzan a bajar las temperaturas y el surgimiento de enfermedades relacionadas a problemas respiratorios.

Por ahora, las próximas vacunas que vendrán al país se especula que serán empleadas en los docentes, teniendo en cuenta que se plantea inciar las clases presenciales en todo el territorio nacional.

Lo que sí hay de certeza, es que la Argentina avanzará rápidamente y procurará vacunar a todos los grupos de riesgo, para de alguna manera volver a una normalidad que todos esperan con ansias.

*Por José Jiménez, editor de Termasdigital.com.ar