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Una mujer busca a su hermano desaparecido hace más de 16 años en Tucumán

Una madre de 86 años espera poder ver su hijo, y su padre mantuvo la misma ilusión hasta el día que partió al cielo. Una búsqueda de casi 17 años que solo se mantiene por la fe y la esperanza.

Lilia Graciela Coronel vive en Villa Balnearia. Ella es oriunda de Loma del Yeso, lugar en el que se ha criado junto a su hermano Segundo Celestino Coronel, a quien busca desde hace 16 años luego que el mismo desapareciera en Tucumán sin dejar rastros ni siquiera a su esposa y sus siete hijos.

La historia comenzó en el año 2.004, entre febrero y marzo, cuando la familia del hombre se comunicó con sus familiares de Las Termas para consultar si Segundo se encontraba en esta ciudad.

Desde entonces se inició una búsqueda por su desaparición, de la cual supuestamente habría una denuncia en la justicia tucumana.

Segundo Celestino cada año venía a Las Termas de Río Hondo a pasar las fiestas con sus padres, Segundo Antonio Coronel y Eleodora Galván. Desde su desaparición, ambos lo esperaron en cada fiesta. Eleodora aun tiene esperanzas a sus 86 años de poder ver a su hijo, mientras que don Segundo Antonio tuvo la misma fe hasta los 91 años, cuando su vida se apagó hace dos años.

El hombre, que actualmente tendría 57 años, trabajaba en estancias tucumanas como hombreador en la junta de la papa en las estancias de los Sánchez, en las zonas de La Calera, Alto Verde, entre otras.

En el peregrinar de las hermanas de Segundo golpearon las puertas de la oficina de Derechos Humanos de Las Termas, Casa de Gobierno de Tucumán, Canal 10, y de una comisaría ubicada en una zona serrana cercana a la ciudad de Concepción. En esta última consiguieron un valioso dato.

Según lo que le reportaron los policías a Lilia, en una fecha coincidente con la desaparición de su hermano, el mismo había estado demorado temporalmente en el puesto policial. Según cuenta Lilia, un comisario le había manifestado que, a causa de un llamado comparecieron en una vivienda, donde Segundo Celestino se había hecho presente en estado de ebriedad queriendo entrar en la misma aduciendo que esa era su casa.

Dado al estado que presentaba, fue trasladado al destacamento policial de donde en pocas horas lo dejaron ir porque había comenzado a tener crisis de abstinencia. Desde entonces, no hubo rastros de Segundo Celestino.

Tras muchos años sin tener novedades, y a falta de recursos para seguir su búsqueda activa, su familia no pierde la esperanza de al menos saber qué le pasó a su familiar.

Hace poco, su hermana Lilia recurrió a las redes sociales para retomar la búsqueda de su hermano, lo que ha desembocado en que mucha gente se comunicara con ella, pero aún sin datos que les permita ver una luz en el camino.

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